domingo, 1 de agosto de 2010

Canción del sainete póstumo

Rubén Martínez Villena (1899-1934)

Yo moriré prosaicamente, de cualquier cosa
(¿el estómago, el hígado, la garganta, ¡el pulmón!?),
y como buen cadáver descenderé a la fosa
envuelto en un sudario santo de compasión.

Aunque la muerte es algo que diariamente pasa,
un muerto inspira siempre cierta curiosidad;
así, llena de extraños, abejeará la casa
y estudiará mi rostro toda la vecindad.

Luego será el velorio: desconocida gente,
ante mis familiares inertes de llorar
con el recelo propio del que sabe que miente
recitará las frases del pésame vulgar.

Tal vez una beata, neblinosa de sueño,
mascullará el rosario mirándose los pies;
y acaso los más viejos me fruncirán el ceño
al calcular su turno más próximo después.

Brotará la hilarante virtud del disparate
o la ingeniosa anécdota llena de perversión,
y las apetecidas tazas de chocolate
serán sabrosas pautas en la conversación.

Los amigos de ahora -para entonces dispersos-
reunidos junto al resto de lo que fue mi "yo",
constatarán la escena que prevén estos versos
y dirán en voz baja: -¡Todo lo presintió!

Y ya en la madrugada, sobre la concurrencia
gravitará el concepto solemne del "jamás";
vendrá luego el consuelo de seguir la existencia...
Y vendrá la mañana... pero tú, ¡no vendrás!...

Allá donde vegete felizmente tu olvido
-felicidad bien lejos de la que pudo ser-,
bajo tres letras fúnebres mi nombre y mi apellido,
dentro de un marco negro, te harán palidecer.

Y te dirán: -¿Qué tienes?... Y tú dirás que nada;
mas, te irás a la alcoba para disimular,
me llorarás a solas, con la cara en la almohada,
¡y esa noche tu esposo no te podrá besar!...

Rubén Martínez Villena -La Habana, Cuba (1899-1934)-Abogado y político. A finales de la década de los veinte macha al exilio. Volvió a Cuba en 1933, aquejado de tuberculosis. Organizó la huelga que puso fin a la dictadura de Gerardo Machado y murió meses más tarde. Poeta hipersensible, exaltado e irónico, más preocupado por la muerte y los temas existenciales que por la ideología personal.

Tomado de la "Antología de la poesía cubana" de José Lezama Lima.




1 comentario:

  1. Los amigos dispersos
    reunidos junto al resto de lo que fue mi yo....

    y cuando se van los amigos
    ya no estoy yo.

    me gusta tu blog ¡felicidades por tu trabajo!

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